Como entrada veraniega de Estética en tiempo de edición..., os presento el nuevo blog que he inaugurado para tratar con mayor profundidad temas de fotografía.
Es una bitácora orientada a la colaboración con los asistentes al curso que he impartido esta primavera, pero os invito también a participar en ella si es de vuestro interés. Y a asistir a la próxima convocatoria del curso, si os resulta sugerente.
En la fotografía en cambio nos sale al encuentro algo nuevo y especial: en esa pescadora de New Haven que mira al suelo con un pudor tan indolente, tan seductor, queda algo que no se agota en el testimonio del arte del fotógrafo Hill, algo que se resiste a ser silenciado y que reclama sin contemplaciones el nombre de la que vivió aquí y está aquí todavía realmente, sin querer entrar nunca en el «arte» del todo. […] el espectador se siente irresistiblemente forzado a buscar en tal fotografía la chispita minúscula de azar, de aquí y de ahora, con la que la realidad ha chamuscado por así decirlo su carácter de imagen: a encontrar el lugar inaparente donde, en la determinada manera de ser de ese minuto que pasó hace ya mucho, todavía hoy anida el futuro y tan elocuentemente que mirando hacia atrás, podemos descubrirlo. La naturaleza que habla a la cámara es distinta de la que habla al ojo: distinta sobre todo porque, gracias a ella, un espacio constituido inconscientemente sustituye al espacio constituido por la conciencia humana. No es difícil, por ejemplo, darse cuenta (aunque sólo sea a grandes rasgos) de la manera de andar de la gente, pero seguro que no sabemos nada de su actitud en esa fracción de segundo en que se alarga el paso. […] Sólo gracias a ella tenemos noticia de ese inconsciente óptico, igual que del inconsciente pulsional sólo sabemos gracias al psicoanálisis.
¡Buen verano!
Conceptos de fotografía: inconsciente óptico |
En la fotografía en cambio nos sale al encuentro algo nuevo y especial: en esa pescadora de New Haven que mira al suelo con un pudor tan indolente, tan seductor, queda algo que no se agota en el testimonio del arte del fotógrafo Hill, algo que se resiste a ser silenciado y que reclama sin contemplaciones el nombre de la que vivió aquí y está aquí todavía realmente, sin querer entrar nunca en el «arte» del todo. […] el espectador se siente irresistiblemente forzado a buscar en tal fotografía la chispita minúscula de azar, de aquí y de ahora, con la que la realidad ha chamuscado por así decirlo su carácter de imagen: a encontrar el lugar inaparente donde, en la determinada manera de ser de ese minuto que pasó hace ya mucho, todavía hoy anida el futuro y tan elocuentemente que mirando hacia atrás, podemos descubrirlo. La naturaleza que habla a la cámara es distinta de la que habla al ojo: distinta sobre todo porque, gracias a ella, un espacio constituido inconscientemente sustituye al espacio constituido por la conciencia humana. No es difícil, por ejemplo, darse cuenta (aunque sólo sea a grandes rasgos) de la manera de andar de la gente, pero seguro que no sabemos nada de su actitud en esa fracción de segundo en que se alarga el paso. […] Sólo gracias a ella tenemos noticia de ese inconsciente óptico, igual que del inconsciente pulsional sólo sabemos gracias al psicoanálisis.
Walter Benjamin, «Pequeña historia de la fotografía».
Este es el primero de los conceptos del diccionario de ideas que iremos desarrollando a lo largo del curso.
Estáis invitados a participar en él ampliándolo con más definiciones, citas, reflexiones personales, imágenes ilustrativas procedentes del mundo del arte, de los medios de comunicación o de vuestra propia cosecha.
Os sugiero que hagáis uso del apartado de comentarios del blog, o que envíeis un correo a tcaball2@xtec.cat.
La idea es ir enriqueciendo cada término o ir proponiendo otros que hayamos tratado en el curso, formar una cadena de pensamiento en relación con las ideas fotográficas.
Un abrazo y buen verano...
Comentarios
Publicar un comentario
Nos encantaría conocer tu opinión o tus comentarios sobre esta entrada. ¡Anímate a intercambiar tus ideas!